Los últimos meses del 2021 fueron lluviosos y con temperaturas suaves. El 2022 arrancó de la misma manera; sin días de frío extremo, pero sin lluvias. La vid comenzó a llorar a finales de marzo por las altas temperaturas de la época, pero la viña no comenzó a brotar hasta finales de abril debido a las bajas precipitaciones primaverales. Mayo fue un mes especialmente atípico debido a las altas temperaturas registradas. La floración se produjo de manera generalizada a mitad de junio de manera rápida y con un cuajado correcto. El verano fue extremadamente seco y cálido con varias olas de calor que provocaron paradas vegetativas puntuales en las plantas más jóvenes. Estas características del ciclo permitieron que el estado sanitario se mantuviera perfecto con una maduración rápida en agosto. La vendimia arrancó el día 1 de septiembre y se prolongó hasta el día 29 del mes.

La parcela de Peña Cruzada, con 0,7 ha de albillo real, forma parte de las ondulaciones del límite de la sierra de Gredos, entre San Martín de Valdeiglesias y la finca Marañones. Las cepas de más de 50 años de edad están rodeades de bosque y de una excepcional biodiversidad, con un equilibrio propio en el que el clima, la variedad, los suelos y la viticultura encuentran una extraordinaria armonía. Los suelos de granito rosa pedregoso y las texturas arenosas de algunas zonas facilitan una viticultura orgánica y de respeto común a todo el proyecto. La suave pendiente y el porte rastrero de las cepas viejas conforman la identidad de esta viña única.

La homogeneidad en la maduración de las cepas de esta parcela permite la elaboración de un vino con una esencia inconfundible. La uva se vendimia manualmente en cajas de 12 kilogramos. Después del prensado, el mosto fermenta en barricas usadas de 228 y 600 litros de capacidad. Tras la elaboración, envejeció durante 10 meses junto a sus lías en las mismas barricas. Para una mayor protección el vino contiene sulfitos. Se embotelló en otoño de 2023.